Todo comenzó con una charla con Vanesa sobre lo bueno que era nadar...y la cosa me quedo dando vueltas....y vueltas....En este nuevo año....con mis resoluciones al frente...con mi esguinze que no quiere sanar del todo y no me deja correr....la fibromialgia que me dice que correr esta bueno pero que mis musculos no soportan tanto golpeteo...empezé a buscar actividades físicas compatibles con mi cuerpo...con mi alma...y con mi tiempo....
Creía que no sabía nadar...aunque hasta los 16 había nadado cada verano en el mar, de muelle a muelle....ida y vuelta...y otra vez. Pense, equivocadamente, que era algo que hacía mal...que no podía...y otra vez las críticas internas me acosaban. Asi que, a clase! y veamos que pasa...
Cada corrección del profesor me llevaba a nadar escuchando mi cuerpo...buscando encontrar ese punto donde el movimiento sale fluido y registrarlo...y repetirlo...y repetirlo...hasta que salia naturalmente, sin pensar....
Despues de la tercera clase cruzé la pileta en unas cuantas poco esforzadas brazadas! Disfrutando de la sensación de estar en el agua...de sentir mi cuerpo moverse...coordinar....deslizarse....sorprendida y feliz!
Lo bueno es que es algo que me dan ganas de hacer...cada día espero ansiosa la hora de la pileta...cuando no tengo clases...a Horco Molle a nadar rodeada por la selva...
Lo mas bueno es que en poco tiempo he visto y sentido a mis músculos más firmes, mi andar mas fluido, mi espalda más blanda, mis hombros más bajos....pero sobre todo toda yo sintiéndose mejor....
Estos dias, en que no pude ir a nadar....mi cuerpo extrañaba el agua....mañana vuelvo....solo pensar la sensación de la primera sambullida...uff!! se siente tan bien!
A pesar de lo gris y los sacudones de este comienzo de año...cosas buenas estan pasando....
Lo mejor es lo que sucede! y sigo adelante...y sigo...a pesar de todo o gracias a todo....
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