Salir a pasear con dos niñas-casi-señoritas de 9 años puede parcer un programa poco atractivo para una niña-mujer de 41...pero para mi, pasar una tarde con mis "sobrinas", Camila y Lucía, es un placer!! Su cariño, sus risas, su frecura, su inocencia logran abrir mi coraza. Invitan a mis 9 años a salir de los oscuros lugares donde estan guardados.
Me hacen olvidarme por un momento de todos los problemas, preguntas, inseguridades, miedos, dudas, preocupaciones del mundo adulto en el que trato de encajar...y me hacen vivir la magia de ver el mundo con otros ojos.
Estos mimos me hacian tanta falta....darlos y recibirlos.....
Gracias chicas!!! y que haya muchos mas dias de minitas!